El martes 3 de septiembre, en el programa televisivo Mesa Redonda, se abordó la nueva política de comercialización de vehículos en Cuba, con la participación del ministro de Transporte, Eduardo Rodríguez Dávila. Las novedades giran en torno a la comercialización, importación y transmisión de la propiedad de vehículos de motor. Aunque la política es reciente, se han ido aclarando aspectos relevantes. El gobierno espera avances en su implementación, y Rodríguez Dávila afirmó que “actualmente, las normas jurídicas están en proceso de conciliación y ajustes. Estas incluyen un decreto y 14 resoluciones de distintos organismos, y se espera que entren en vigor antes de que concluya octubre”.
El objetivo declarado de estas leyes es mejorar la gestión pública, facilitando que los ciudadanos accedan a vehículos de manera más ágil. No obstante, esta medida ha generado debate y controversia entre la población, ya que muchos se preguntan cómo esta política impactará realmente a quienes dependen de su salario para cubrir necesidades básicas. A pesar de que la noticia puede parecer positiva a primera vista, muchos cubanos consideran inalcanzable la posibilidad de adquirir un vehículo, dados los bajos salarios y las condiciones económicas del país.
En un artículo publicado en el sitio web del periódico Granma, un lector comentó: “En Cuba es cierto que se necesitan vehículos, y la comercialización debería ser más accesible para todos. Sin embargo, en un país donde el combustible escasea, se debería priorizar la producción y venta de vehículos eléctricos, que ya han demostrado buenos resultados”. Otra usuaria cuestionó por qué no se permite a los cubanos residentes en el exterior importar autos.
La noticia también ha generado un gran número de comentarios en redes sociales. Mientras que algunos expresan su esperanza de poder beneficiarse de estas nuevas políticas, otros manifiestan escepticismo. Un internauta, identificado como Xiguarat, ironizó: “Abrieron la llave, se formó el relajo. Las colas para la gasolina serán de 5 km”. Otro usuario comentó: “Quisiera que el ministro me explique cómo podría comprarme un carro con mi salario y pagarlo con un crédito”.
Según Rodríguez Dávila, los ingresos generados por los impuestos y aranceles de esta política se destinarán a un fondo gestionado por el Ministerio del Transporte, con el fin de mejorar el transporte público y su infraestructura. El ministro añadió que la actualización de esta política tiene como objetivo facilitar el acceso de las personas, con capacidad económica, a diversas alternativas para satisfacer sus necesidades de movilidad mediante recursos propios.
Por su parte, el youtuber cubano, analista político opositor y empresario Eliecer Ávila cuestionó cómo es posible que ahora se puedan importar medios de transporte, algo que antes el régimen cubano consideraba imposible debido al bloqueo, si desde Estados Unidos no ha habido ningún cambio en su política al respecto.