El paquete semanal, ese compendio de audiovisuales repartido por toda la Isla para sortear la baja calidad de los programas oficiales de la televisión cubana, ha visto reducida su cantidad de contenido a apenas 500GB, cuando habitualmente supera el terabyte de información. Esta drástica disminución refleja el impacto de la crisis energética y las interrupciones eléctricas en el proceso de recopilación y distribución del material.
En la entrega actual, por ejemplo, faltaron carpetas esenciales como la de “actualizaciones de antivirus”, que suele incluir archivos para programas como Avira, Windows Defender y Kaspersky. Para muchos cubanos, debido a los altos precios de Internet que ofrece ETECSA, resulta más práctico esperar al paquete semanal para actualizar el antivirus que gastar sus limitados megas descargándolos directamente.
Otras secciones habituales como “juegos”, “música actualizada” y “mangas anime” tampoco estuvieron presentes en esta edición, dejando a sus consumidores sin ese contenido tan esperado. Esta ausencia ha generado preocupación entre los usuarios habituales, que ven al paquete como una de sus principales fuentes de entretenimiento y actualización digital.

“Esto nunca había pasado, tiene que ser producto de los apagones”, dijo Carlos, un repartidor de paquetes en La Habana que lleva más de una década ofreciendo este servicio, en declaraciones a tecnologiacuba. A pesar de la situación, Carlos se mantiene optimista: “El paquete no muere”, afirmó con convicción cuando se le preguntó si cree que esta crisis podría marcar el final de esta popular alternativa.
El paquete semanal se confecciona principalmente en La Habana y Mayabeque, donde varias matrices recopilan la información y la distribuyen por toda la Isla usando dispositivos USB y las redes callejeras. Sin embargo, la falta de fluido eléctrico ha dificultado este proceso, afectando tanto la recopilación de material como la capacidad de distribución en tiempo y forma.
La crisis energética en Cuba ha alcanzado niveles críticos, con apagones que en algunas provincias superan las 20 horas diarias. Por ejemplo, en Matanzas, las autoridades han informado que la población recibe aproximadamente una hora de electricidad al día debido a las prolongadas interrupciones del servicio eléctrico. Esta situación ha llevado al gobierno a suspender actividades docentes y laborales durante dos días para reducir el consumo energético.
La combinación de cortes eléctricos prolongados, escasez de combustible y el deterioro de las plantas termoeléctricas ha afectado gravemente la vida cotidiana de los cubanos, obligando a muchos a recurrir a métodos tradicionales como cocinar con carbón.